El Papa León XIV expresó su deseo y compromiso de participar en este vasto proyecto. Se puso a la escucha de todos, en la medida de lo posible, para aprender, comprender y decidir juntos. Como cristiano con ustedes y como Obispo para ustedes. Estas fueron sus palabras durante la homilía de la misa en la Basílica de San Juan de Letrán, donde tomó posesión de la cátedra de Obispo de Roma, en la tarde del sexto domingo de Pascua.

Antes de dirigirse a la catedral de Roma, el Papa León hizo una parada en el Capitolio romano, sede de la administración cívica y democrática de la ciudad. Allí, recibió el saludo y homenaje del alcalde, Roberto Gualtieri.
Durante la solemne celebración eucarística, el cardenal Baldassare Reina, vicario del Papa para la diócesis de Roma, dirigió unas palabras: “Ocupar la cátedra pastoral es atender amorosamente al rebaño de Cristo”. El cardenal Reina fue el primero en realizar el acto de obediencia y devoción filial, seguido de una representación de la diócesis de Roma.
Roma, heredera de una gran historia consolidada en el testimonio de Pedro, Pablo y de innumerables mártires, tiene una misión única, como se lee en la fachada de esta catedral: ser Mater ómnium Ecclesiarum (Madre de todas las Iglesias). Así lo afirmó el Pontífice en su homilía, tras saludar a los cardenales, obispos, sacerdotes y fieles que asistieron a la celebración en la basílica lateranense.
Al concluir, el Papa León XIV citó palabras del Beato Juan Pablo I, quien al saludar a su nueva familia diocesana, expresó: “puedo asegurarles que los amo, que solamente deseo servirlos y poner a disposición de todos mis pobres fuerzas, todo lo poco que tengo y que soy”.