El Gobierno de México propone la reducción gradual de la jornada laboral a 40 horas

La reforma para reducir la jornada laboral de 48 a 40 horas semanales retoma su curso en México. En el marco de la conmemoración del Día del Trabajo, la presidenta Claudia Sheinbaum ha anunciado que a partir de esta semana se instalarán mesas de diálogo para la implementación de esta medida.

“No se puede hacer la reducción de un día a otro, pero lo importante es ver cómo lo vamos a hacer y que sea un acuerdo que nos permita que haya mejores condiciones para los trabajadores”, declaró la mandataria en Palacio Nacional, ante los principales líderes sindicales del país. El objetivo del Gobierno federal es que las empresas acepten reducir su semana laboral de manera gradual, hasta alcanzar las 40 horas en 2030.

El secretario del Trabajo, Marath Bolaños, anunció que el debate sobre la reducción de la jornada laboral incluirá a empresarios, sindicatos y trabajadores. Bolaños enfatizó que este cambio se hará mediante un diálogo social que involucre a todos los involucrados.

Además, aclaró que reducir las horas de trabajo no disminuye la productividad ni el valor general, sino que dignifica la existencia de los trabajadores al devolverles tiempo y valorar su trabajo semanal.

La reducción de la jornada laboral plantea desafíos para las empresas en un contexto de desaceleración económica, baja inversión y escasa creación de empleo. Juan José Sierra, presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), cree que ahora no es el momento para implementar esta propuesta. En cambio, sugiere centrarse en hacer de México un destino de inversión más atractivo.

La propuesta de reducir la semana laboral en México no es nueva, sin embargo, no ha podido avanzar por los cauces legislativos. En octubre de 2022, la iniciativa fue presentada por la diputada de Morena, Susana Prieto Terrazas. Tras semanas de cabildeos y de debate a favor y en contra, la propuesta fue congelada. Ahora, en la actual Administración, el Poder Legislativo tampoco llevó a buen puerto su discusión en los periodos ordinarios de la Cámara de Diputados.

En México, la ley establece un máximo de 48 horas laborales semanales, con ocho horas diarias y un día de descanso. Sin embargo, muchos trabajadores exceden las 56 horas sin que los empleadores enfrenten sanciones. Reducir la semana laboral a 40 horas implicaría dos días obligatorios de descanso. Los empleadores se resisten porque trabajar un sábado implicaría pagar triple a los empleados.

Noticia Anterior Noticia Siguiente

Formulario de contacto